Investigadores de la Universidad de Zúrich (UZH) y del Hospital Universitario de Zúrich (USZ) han desarrollado un método avanzado para secuenciar y analizar fragmentos de ADN en la sangre mediante biopsia líquida, en lugar de en órganos o tejidos, que ayudará a mejorar los tratamientos contra el cáncer.
Según han señalado los investigadores, el nuevo método es rápido y práctico, y no supone un gran esfuerzo para los pacientes. Esto podría permitir en el futuro ofrecer diagnósticos y tratamientos más personalizados para cada paciente.
El coautor principal del estudio en el Departamento de Biomedicina Cuantitativa de la UZH, Zsolt Balázs, ha explicado que podrá utilizarse “para la evaluación de riesgos, el seguimiento del tratamiento y la detección temprana de la recurrencia del cáncer, en principio para todos los tipos de tumores”.
Como el método se basa en muestras de sangre, es menos invasivo que realizar biopsias de tejido, por ejemplo. Además, la toma de muestras de sangre es rápida y más práctica en las operaciones diarias del hospital, ya que se necesitan menos citas para intervenciones de diagnóstico, lo que ahorra a los afectados largas esperas.
El nuevo método puede ayudar a los oncólogos a determinar con mayor precisión la actividad y la propagación del tumor. Esto permitirá desarrollar terapias adaptadas a cada paciente. “Podremos ver antes y con mayor rapidez cuánto se ha extendido el cáncer en el cuerpo y cómo responde un paciente a un tratamiento específico o si habrá una recaída”, ha destacado Zsolt Balázs.