Opinión

Tal cual

PARÁSITO 1. Hay personas que son como un resfriado mal cuidado: cuando uno se siente mejor y cree que se está recuperando del virus, de pronto ocurre una recaída. Algo así ha ocurrido con Quibián Panay, secretario general de la Asamblea Nacional (AN) hasta el pasado 30 de junio y esposo de la exdiputada Yanibel Ábrego. Ayer jueves se conoció que Panay fue designado como director general de Administración y Finanzas en el Legislativo, cuya posición devenga un salario de $5,000. Uno no se saca estos parásitos ni con antibiótico.

PARÁSITO 2. Pero la alargada sombra de Yanibel no está solo sobre Quibián: la abogada Ceila Peñalba, que la representó en una denuncia contra el medio digital Foco por usar una foto de ella sin su consentimiento, es la nueva directora nacional de Asesoría Legal en Asuntos Administrativos de la AN. Esta gente no parece haber entendido el mensaje del electorado en las urnas.

AUDITORÍA. Tras el evidente abultamiento de la planilla Estatal durante el quinquenio pasado, en varias instituciones se han visto funcionarios pululando por los pasillos sin aparente oficio y sin puestos en donde trabajar. Ya va siendo tiempo de que el contralor Gerardo Solís le explique a la ciudadanía como es que estas personas cobraron un salario si no trabajaban, o es que pretende volvernos a decir que la planilla del Estado se había reducido y no aumentado.

PATINAZO. “Mi único interés es seguir ejerciendo el derecho ciudadano y estaba preocupado por lo que estaba pensando el presidente sobre el tema de la mina”, fue la explicación que dio el diputado de MOCA, Ernesto Cedeño sobre sus intenciones al proponer un proyecto de ley que permitiera a los abogados diputados seguir litigando. Verdaderamente que hay explicaciones que lejos de aclarar oscurecen.

DERROCHE. La presidenta de la Asamblea, Dana Castañeda, se fue a su circuito en Coclé para participar en la celebración que preparó su sobrina y nueva alcaldesa de La Pintada, Ina Castañeda, para darle la bienvenida. Hubo comidas, calles de honor, bandas escolares, etc., a fin de que ambas pudieran plantar bandera en el distrito coclesano. ¿No que absoluta austeridad?