Opinión

Tal Cual

ERARIO. Hasta hace poco no habíamos ni escuchado la voz del magistrado del Tribunal Electoral, Luis Guerra, y cuando lo hicimos lo oímos decir, en un tono ofuscado y hasta soberbio, que ellos no tenían nada que consultar a los partidos RM y Alianza sobre la postulación de su ahora candidato presidencial. A ver con qué tono nos explica que sus hijos Luis Alfonso y María del Pilar están nombrados en la Autoridad Marítima y el Ministerio de Salud, con salarios mensuales de $2,000 y $3,000 respectivamente. Bueno, si es que piensa que debe rendir cuentas por la palanca.

VIGORÓN. Uno que sabe de lo que habla cuenta que hay negociaciones para una posible salida del refugiado de la embajada de Nicaragua para irse a ese país. Dicen que ya hasta su familia fue a despedirse. Desde la Cancillería no lo afirman, pero tampoco lo niegan. Esta movida explicaría el por qué del viaje repentino de la tía Marta. Si esto resulta ser cierto, es probable que hoy mismo veamos acción en La Alameda. ¿Tanta seguridad tiene en su candidato?

EN CUENTA. El hasta ahora candidato presidencial por RM y Alianza, José Raúl Mulino, estuvo ayer 1 de mayo por el Tribunal Electoral, supuestamente para reunirse con los magistrados. Consultado sobre el tema de su reunión, su respuesta fue “yo no tengo por qué decirselo a ustedes”. Por lo pronto, no sabemos a qué fue realmente a Costa Rica, ni qué habló con los magistrados... ¿Qué más no sabemos de Mulino?

TELONERO. Está comprobado que para los cierres de campaña del PRD la estrella nunca es el candidato. Hace cinco años, luego del discurso de Laurentino Cortizo, cantó Sech y ahora, después de Gaby Carrizo, se presentó El Boza. Ah, y antes Osvaldo Ayala y hasta Samy y Sandra Sandoval. ¡De que hay plata... hay plata!

SER O NO SER. Según Melitón Arrocha, no ha renunciado a sus aspiraciones presidenciales. Sin embargo, se le vio ayer miércoles caminando junto a su nuevo candidato presidencial. ¿Si no estaba buscando votos para él, no es esto una renuncia tácita a su candidatura? Verdaderamente, hay sumas que restan.