Opinión

El precio de la Guerra Rusa

Han pasado mil días desde que la Federación Rusa lanzó su invasión militar a gran escala, ilegal, no provocada y no justificada, contra Ucrania el 24 de febrero de 2022, que se convirtió en la expansión de la agresión armada de la Federación Rusa que viene ocurriendo desde el 19 de febrero de 2014. La guerra de agresión de Rusia contra Ucrania ya ha cobrado la vida de miles de ucranianos, causado la destrucción de ciudades enteras e infraestructura civil crítica, y llevado al sufrimiento de millones de ucranianos que perdieron sus hogares.

Pero la guerra de agresión de Rusia no se trata solo de Ucrania. Ha creado efectos de onda que destabilizan la seguridad global en múltiples dimensiones. Además, la participación de tropas norcoreanas en la guerra de agresión de Rusia contra Ucrania constituye una internacionalización adicional del conflicto y su expansión más allá de las fronteras de los dos estados.

Para detener la agresión rusa, el presidente de Ucrania, Volodymyr Zelenskyy, ha iniciado la Fórmula de Paz y el Plan de Victoria, que siguen siendo la única vía viable para restaurar una paz integral, justa y duradera para Ucrania y preservar el sistema de seguridad global de una erosión mayor.

La escala de la agresión rusa desde febrero de 2022 y el nivel de daño devastador es sin precedentes en la historia moderna:

- Se lanzaron aproximadamente 11.500 misiles contra Ucrania.

- Se desplegaron más de 33.000 bombas aéreas guiadas.

- Cada mes, se lanzaron alrededor de 4.000 bombas aéreas guiadas, de las cuales 3.200-3.500 impactaron en infraestructura civil.

- Más de 13.500 civiles ucranianos, incluyendo casi 590 niños, han muerto desde febrero de 2022.

- Casi 26.000 civiles han resultado heridos.

- Se registraron 65.956 militares y civiles como desaparecidos o capturados.

- Más de 11 millones de ucranianos se vieron obligados a huir de sus hogares.

- Las autoridades ucranianas documentaron alrededor de 150.000 crímenes de guerra y delitos relacionados con la agresión rusa.

- Se destruyeron más de 193.000 instalaciones de infraestructura civil.

Rusia se apoderó de la Central Nuclear de Zaporizhzhia (ZNPP) en Ucrania, la mayor instalación nuclear de Europa, y constantemente amenaza las centrales nucleares ucranianas con sus ataques, creando una amenaza sin precedentes para la seguridad nuclear global:

Las acciones de Rusia en la ZNPP han llevado a:

- Ocho apagones completos y uno parcial en la ZNPP.

- Violaciones sistemáticas de protocolos de seguridad nuclear.

- Deterioro de equipos críticos sin mantenimiento adecuado.

- Aumento de riesgos de incendio debido a sistemas de seguridad comprometidos.

Esto hace que la amenaza de desastre nuclear sea muy alta, ya que la ZNPP es una central de seis reactores, por lo que los daños potenciales podrían superar con creces los causados por la explosión de un solo reactor en la central de Chornobyl.

En las últimas semanas, se han detectado más de 100 drones y misiles rusos volando cerca de las centrales nucleares ucranianas.

La invasión rusa ha frenado significativamente la recuperación y desarrollo económico global. La guerra fue uno de los principales factores que ralentizó el crecimiento económico global a solo el 3.2% en 2022 y aumentó la inflación.

Ucrania ha perdido acceso a recursos minerales valorados entre 12,5 y 15 billones de dólares estadounidenses debido a la ocupación temporal, fundamentales para el desarrollo tecnológico global y la transición energética verde.

Además, el gasto militar global alcanzó los 2443 billones de dólares estadounidenses en 2023, un aumento del 6,8% en términos reales respecto a 2022, el mayor aumento interanual desde 2009, lo que refleja la deterioración global de la paz y la seguridad debido a la agresión rusa.

El papel de Ucrania como contribuyente crucial para la seguridad alimentaria global ha sido gravemente comprometido por la agresión armada rusa. Las consecuencias han afectado a aproximadamente 400 millones de personas en todo el mundo que dependen de las exportaciones de alimentos ucranianos.

La escala de destrucción es impactante:

- Pérdidas totales para el sector agrícola ucraniano: 80 mil millones de dólares estadounidenses, incluyendo 13 mil millones de dólares en pérdidas directas.

- 30% de la capacidad agrícola de Ucrania ha sido destruida.

- Casi el 20% de la tierra agrícola está bajo ocupación temporal.

- La producción de grano disminuyó un 29% en 2022-2023.

- La superficie cultivada disminuyó en 2,8 millones de hectáreas.

Además, Ucrania es actualmente el país más minado del mundo:

- Hasta el 25% de su territorio está en riesgo de contaminación con minas terrestres y municiones sin explotar.

- Más de 140.000 kilómetros cuadrados de tierra y agua están minados.

El impacto ambiental de la agresión rusa tiene implicaciones globales:

- 180 millones de toneladas de emisiones de CO2 generadas por la guerra.

- 3 millones de hectáreas de bosque dañadas por operaciones militares.

- 24.000 hectáreas de bosque destruidas por incendios.

- Daños por contaminación del agua estimados en 2.060 millones de euros.

- Impacto ambiental por la destrucción del dique de Kakhovka estimado en 3.500 millones de euros.

- 139.000 kilómetros cuadrados requieren remediación ambiental.

Estas cifras alarmantes resaltan la gravedad del daño ambiental causado por la agresión rusa, que no solo afecta a Ucrania sino también al planeta en su conjunto.

La lucha de nuestro país por la vida continúa desde hace casi 1000 días. Y esta lucha no es solo por Ucrania. Es sobre cada persona que valora la libertad, el derecho a elegir su propio camino y un futuro sin guerra. La guerra de Rusia contra Ucrania es un intento de restaurar un imperio colonial, esclavizar a nuestro pueblo, arrebatarnos nuestra libertad y derecho a elegir.

El futuro de nuestro planeta depende de cada uno de nosotros hoy en día - personas que vivimos en diferentes rincones del mundo, pero compartimos una comprensión común de conceptos como la libertad y la justicia.

La autora es embajadora de Ucrania para Panamá