Uno de los grandes pensadores del siglo XX, José Ingenieros, advertía en su obra Las Fuerzas Morales que “Cada vez que una generación envejece y reemplaza su ideario por bastardos apetitos, la vida pública se abisma en la inmoralidad y en la violencia”. Y afirmaba que las grandes crisis “ofrecen oportunidades múltiples a la generación incontaminada, pues inician en la humanidad una fervorosa reforma ética, ideológica e institucional”.
Panamá vive uno de los periodos más difíciles de su historia, en el que un alto porcentaje de la población ha abandonado los tradicionales valores éticos y morales para abrazar la inmoralidad, la falta de ética y el “juega vivo”. Como bien señalaba Ingenieros, en tales circunstancias suele emerger la juventud consciente para convertirse en “la levadura moral de los pueblos”.
Es lo que ocurre en Panamá con el surgimiento de grupos de jóvenes inspirados en restituir los valores éticos y morales perdidos y corregir las deficiencias que amenazan con anclar a Panamá en el subdesarrollo. Uno de estos grupos es Jóvenes Unidos por la Educación, que se ha enfocado en el esfuerzo nacional por rescatar la educación del abismo en donde se encuentra, para modernizarla y ubicarla como instrumento de desarrollo integral. Sabe ese grupo que sin una educación de calidad que llegue, indiscriminadamente, a todos los sectores de la sociedad, Panamá no podrá superar la crisis institucional y de valores que obnubila a muchos de sus ciudadanos e impide a grandes segmentos integrarse al desarrollo económico y social.
Jóvenes Unidos por la Educación (JUxlaE) se define como “un movimiento incluyente conformado por individuos de diferentes sectores, interesado en promover un mejor futuro para Panamá a través de un sistema educativo de calidad”. Fomenta la institucionalización de una amplia red de capítulos en todo el país, con el objetivo de “lograr una educación de calidad, con pertinencia y equidad”. La pertinencia implica que la educación sea adecuada, eficaz y conveniente, y la equidad consiste en garantizar educación de calidad a los grupos marginados, Al tiempo que participa en el esfuerzo nacional para modernizar la educación, JUxlaE organiza diversas actividades con participación de expertos nacionales e internacionales.
Su primer conversatorio fue virtual y contó con la participación del reconocido pedagogo español Salvador Rodríguez Ojaos, como expositor, quien se enfocó en el tema “La deserción escolar y las escuelas aburridas”. Para el próximo 15 de agosto, ha programado un conversatorio en conmemoración del aniversario 103 del Canal de Panamá, con el administrador de la ACP, Jorge Quijano, los exdirectivos Eloy Alfaro y Jorge Ritter, y el actual directivo, Óscar Ramírez, rector de la Universidad Tecnológica de Panamá.
“El papel de la juventud en el Canal de Panamá”, será un conversatorio en el que se examinará el rol histórico de los jóvenes en el rescate de la soberanía sobre nuestro principal recurso. Es un foro apropiado para impulsar un rol proactivo de las actuales y futuras generaciones en defensa de ese patrimonio nacional, justo en momentos en que intereses foráneos intentan impedir su aprovechamiento en beneficio de Panamá y los panameños. El conversatorio estará abierto a preguntas de personas de 15 a 35 años de edad sobre el rol de la juventud en el futuro del Canal, y cada una de las cinco mejores preguntas será premiada.
El escenario histórico del conversatorio considerará cómo, a raíz del nacimiento de Panamá como Estado independiente en 1903, los panameños fuimos privados del aprovechamiento de nuestro principal recurso, nuestra privilegiada posición geográfica, en virtud del tratado Hay-Bunau Varilla. Desde entonces, liderada por intelectuales, obreros y estudiantes, Panamá inicia una cruenta lucha que tuvo su punto de inflexión en la gesta heroica de 1964, que culmina con la reivindicación de nuestra soberanía sobre el Canal y la Zona del Canal.
Con la recuperación de su patrimonio más valioso, Panamá logra posicionar el Canal y su cluster marítimo al servicio del desarrollo nacional. La ampliación del viejo canal abre enormes posibilidades para el país. El enorme potencial de sus riberas podrá ser aprovechado para generar inversiones, empleo e ingresos al Estado, a fin de apoyar el desarrollo integral del país a través de una educación inclusiva y de calidad.
El autor es periodista