Las redes regionales de poblaciones clave y personas con VIH de América Latina y el Caribe (ALC) lanzaron un llamado urgente a los gobiernos de la región para garantizar el financiamiento sostenible de la respuesta al VIH, ante el riesgo de retrocesos en los avances alcanzados en las últimas décadas.
El pronunciamiento fue emitido en Quito, Ecuador, durante el Simposio Regional “Comunidad y Ciencia Unidas para la Eliminación del VIH” y la reunión anual del Grupo de Cooperación Técnica Horizontal (GCTH), celebrados este mes de noviembre de 2025.
Entre las organizaciones firmantes figuran RedTRASEX, RedLacTrans, RedCA+, RedLAC+, ICW Latina, GayLatino y la Coalición de Pueblos Indígenas, entre otras.
Alerta por reducción de fondos
Las organizaciones advirtieron que la disminución progresiva del financiamiento internacional amenaza la continuidad de programas comunitarios esenciales y podría poner en riesgo la sostenibilidad de la respuesta en ALC.
Recordaron que el mundo cuenta con el conocimiento científico, los tratamientos y las herramientas para avanzar hacia la eliminación del VIH como problema de salud pública, pero subrayaron que alcanzar ese objetivo requiere voluntad política sostenida y una inversión pública que permita cerrar las brechas existentes.
Las redes insistieron en que los Estados deben asumir el liderazgo en la financiación, fortalecer sus sistemas de salud y establecer mecanismos nacionales que aseguren recursos para la sociedad civil. Asimismo, pidieron dejar atrás modelos verticales y reconocer formalmente el rol de las comunidades como parte integral de los sistemas sanitarios.
Comunidades en el centro
Las organizaciones reafirmaron que, incluso en los contextos más adversos, las comunidades han sido el sostén de quienes viven con VIH: realizan acompañamiento emocional, acercan a pacientes que se han desvinculado del tratamiento y brindan apoyo donde los servicios formales no alcanzan.
Por ello, consideraron que su participación activa en la planificación, prevención, diagnóstico y seguimiento clínico no es opcional, sino parte de una respuesta efectiva.
Desigualdad estructural y hoja de ruta
El comunicado destacó que la enfermedad avanzada por VIH refleja desigualdades persistentes, falta de integración entre servicios y la ausencia de acompañamiento continuo.
Para enfrentar estos retos, las redes presentaron una hoja de ruta regional 2025–2027 que incluye:
+ Modelos de revinculación comunitaria.
+ Creación de un Observatorio Regional de Continuidad del Cuidado.
+ Integración de la salud mental como eje transversal.
+ Contratación social y financiamiento directo a organizaciones comunitarias.
+ Fortalecimiento de la cooperación sur-sur para el intercambio de conocimientos.
También recordaron que la prevención debe ser entendida como una política continua, con disponibilidad garantizada de tecnologías preventivas y programas liderados por organizaciones que trabajan directamente con juventudes, mujeres y poblaciones históricamente excluidas.
Datos recientes
De acuerdo con la Organización Panamericana de la Salud, en 2023 había 4 millones de personas con VIH en las Américas, de las cuales 2.7 millones vivían en América Latina y el Caribe.
Entre 2010 y 2023, la región registró un aumento del 9% en nuevas infecciones, alcanzando unas 120,000 en 2023.
El VIH continúa afectando de manera desproporcionada a poblaciones clave, como hombres que tienen sexo con hombres, mujeres trans y trabajadoras sexuales, que concentraron más de la mitad de las nuevas infecciones en América Latina en 2021.



