Acompañado de sus candidatos a las dos vicepresidencias, Guillermo Ford y Alejandro Posse, Endara comienza su charla con una confesión: "cuando empecé esta campaña no me imaginaba que iba a tener tanto apoyo".
Sobre la escogencia de sus vicepresidentes, relata: "con Billy [Guillermo Ford] he sido compañero desde el segundo grado" y "a Posse le tienen mucha fe en el campo. Es un héroe del sector agropecuario".
Como lineamientos de un segundo gobierno de Guillermo Endara, menciona la austeridad ("nosotros ya tenemos experiencia en eso"), la lucha contra la corrupción ("frena las inversiones y la creación de empleos") y la convocatoria a una Asamblea Constituyente ("Winston Robles siempre me regaña por no haberla hecho en 1990.... ahora no hay 'tu tía' , hay que hacer realidad que todos somos iguales ante la ley").
En el área económica, Endara aludió a su controvertida propuesta de volver a la estructura original de un Ministerio de Planificación y Política Económica (MIPPE) y otro de Hacienda y Tesoro, lo que en sus palabras, equivaldría a "deschapmanizar" el Ministerio de Economía y Finanzas. "Ford se encargaría de la parte de la planificación", agregó.
El candidato a la primera vicepresidencia aprovechó la ocasión para hacer alusión al comentado refinanciamiento de la deuda. Ford aclaró que en ese asunto habían sido malinterpretados. "Nadie quiere cambiar las reglas del juego, sino aliviar la pesada carga para que el diferencial sea utilizado en inversión social", aseguró.
Sobre el TLC con Estados Unidos, Guillermo Endara manifestó que no le teme al tratado "sino a la velocidad y a la improvisación".
Para el expresidente, se trata de darle una protección adecuada "no excesiva" a los sectores productivos.
Alejandro Posse aprovechó el tema para agregar que "se requiere prudencia y equilibrio, pues no podemos hablar de un globalizador y un globalizado, como si fuesen un conquistador y un conquistado".
De entre los interrogantes, se abrió paso la relación del candidato presidencial con el Tribunal Electoral (TE), a raíz de las decisiones de la institución de sacar del aire dos comerciales de su campaña (uno por el uso de los símbolos arnulfistas y el otro por la utilización de la imagen de Arnulfo Arias). Antes de que el fiscal electoral emitiera su opinión al respecto -en la que sustentaba que Moscoso no tiene el estado civil necesario para reclamar el derecho sobre la imagen de Arias-, Endara señaló que: "el TE suspendió la cuña a pesar de que en el expediente no existe una sola prueba sobre la calidad de heredera universal de la imagen de Arnulfo Arias... quisiera creer que los dos magistrados que condecoré en 1994 son imparciales, pero lo único evidente es que esa señora va a intervenir en todo el proceso electoral", sentenció.
Dos interrogantes de índole personal ocuparon los últimos minutos de la reunión. Se le preguntó por su salud y el ex presidente no demoró su respuesta: "mi salud está bien con excepción de la diabetes". "Sucede que cuando fui presidente había en palacio una repostera buenísima que me cocinaba muchos dulces". Y añadió con sonrisas, "la buena noticia es que ella se está jubilando".
Tras una pausa aseguró con tono más grave que, "Dios me llamará cuando El decida, pero yo creo que por ahora me quedo".
También se le consultó sobre la forma en que el escándalo de PECC había afectado su amistad con Ernesto Pérez Balladares; especialmente porque el mensaje central de su campaña ha sido la lucha contra la impunidad y la importancia de atrapar a un 'pez gordo' implicado en casos de corrupción.
Encogiéndose de hombros, Guillermo Endara contestó que Pérez Balladares "es mi amigo... y, no todos mis amigos son inocentes". Si es mi amigo significa que de estar en la cárcel, "yo quiero ir a visitarlo allá", aseguró sin vacilación.
Algunos dudan de que Guillermo Endara sea un buen presidente; lo que parece obvio, es que muchos lo escogerían de amigo. Con esta impresión en el ambiente, se despidió sonriente el ex presidente.