La Secretaría Nacional del Ferrocarril (SNDF) ha identificado el 90% de los predios que serán impactados durante la primera fase del ferrocarril que se construirá hasta la frontera con Costa Rica y que abarcará el tramo entre Rodman y Divisa.
En total, se espera que durante la fase de construcción de este tramo se impacten entre 850 y 1,000 predios, por lo cual la SNDF lanzó la licitación pública para contratar los servicios de investigación, verificación y validación catastral de las propiedades ubicadas a lo largo de los primeros 200 kilómetros que recorrerá el ferrocarril.
Por el momento, seis empresas han mostrado interés en participar en la licitación, que tiene un precio de referencia de 428 mil dólares. Aunque durante la reunión de homologación del pliego se solicitó revisar el monto —ya que algunos interesados manifestaron que era bajo— este se mantuvo, bajo el argumento de que el contrato no implica realizar trabajos topográficos en gran parte del recorrido.
Merconsult, Proyeco, Land Surveying Panamá, Geomática Asesores y South Geosystems de Panamá han mostrado interés en el contrato de cuatro meses para recabar toda la información catastral de los predios identificados por la SNDF.

De las 14 estaciones que contempla el proyecto ferroviario, ocho se ubican en la primera fase hasta Divisa; las restantes seis se distribuyen entre Santiago de Veraguas y la frontera entre Panamá y Costa Rica.
Recientemente, la Secretaría del proyecto ferroviario contrató de forma directa a la empresa Tecnilab, S.A. para la ejecución de un nuevo estudio geotécnico a lo largo del trazado del futuro tren.
El contrato, valorado en 1.1 millones de dólares, incluye la realización de sondeos, pruebas de campo y análisis de laboratorio, con el propósito de evaluar la capacidad de carga, estabilidad y comportamiento de los suelos y rocas en la zona.

El estudio contempla 70 perforaciones estratégicamente ubicadas en las áreas donde se construirán viaductos y túneles, con profundidades que oscilarán entre los 40 y 50 metros. Según la Secretaría, los resultados permitirán definir recomendaciones clave para el diseño de las obras civiles. Tecnilab, S.A. ya había participado en estudios similares en 2018.
Preliminarmente, se ha indicado que será necesario construir más de 70 puentes a lo largo de los más de 400 kilómetros que recorrerá el ferrocarril, un proyecto que ha generado interés a nivel nacional e internacional.
Actualmente, la empresa estadounidense AECOM elabora el Plan Maestro del tren, documento que debe estar terminado en julio. El plan incluirá estudios técnicos, diseño conceptual, análisis de demanda, estimaciones presupuestarias y estrategias de implementación.
Servicio a contratar
La empresa que se adjudique el contrato para realizar la investigación, verificación y validación catastral y registral de predios en el tramo Rodman–Divisa deberá obtener información oficial y actualizada sobre las fincas ubicadas dentro del alineamiento de la Fase 1.
Su labor incluirá acceder a fuentes oficiales como la Autoridad Nacional de Administración de Tierras (Anati), la Unidad Administrativa de Bienes Revertidos (UABR), el Banco Hipotecario Nacional, Reforma Agraria, municipios y el Registro Público, con el fin de entregar datos precisos sobre la ubicación, dimensiones, límites, propietarios y condiciones legales de cada predio.

El contratista no deberá levantar el catastro completo, ya que la SNDF proporcionará una base de información previamente elaborada. Su función será complementar y validar los datos existentes, atendiendo únicamente las áreas señaladas por la Secretaría.
Para cada finca se requerirá una ficha que detalle la información catastral y registral vigente, incluyendo trámites pendientes, anotaciones marginales, gravámenes, servidumbres, procesos de titulación u otros factores que puedan afectar el estatus legal de la propiedad.
La empresa también tendrá que garantizar que toda la documentación recopilada cuente con los sellos y validaciones de las instituciones oficiales correspondientes, de modo que la SNDF pueda proyectar el impacto del trazado ferroviario sobre predios privados o estatales con fundamento legal y técnico.
Igualmente, el contratista deberá crear una Base Catastral de Predios Potencialmente Afectados, un sistema digital que agrupe las fincas ubicadas dentro del corredor ferroviario.
Cada predio deberá ser validado en el Registro Público y documentado en una ficha técnica con información detallada, incluyendo datos legales, registrales, catastrales, antecedentes de propiedad, posibles restricciones, valores y cualquier condición especial, como sitios arqueológicos o infraestructura pública existente.
Además, deberán elaborarse listados oficiales y archivos físicos organizados geográficamente desde Panamá hasta Divisa, así como representaciones gráficas sobre ortofotos con los planos aprobados.
En caso de identificarse conflictos como traslapes entre fincas o desajustes entre los polígonos y la realidad física del terreno, el contratista tendrá que presentar un Informe Técnico de Incidencia Catastral que detalle la situación y proponga soluciones desde una perspectiva técnica y legal.
Lo que se conoce del proyecto
Cerca de tres horas duraría el recorrido del tren que planea construir el gobierno de José Raúl Mulino entre la ciudad de Panamá y Paso Canoas, en la frontera con Costa Rica.
El proyecto contempla una velocidad máxima de 180 kilómetros por hora y 14 estaciones distribuidas a lo largo del trayecto: Ciudad de la Salud, Albrook, Panamá Pacífico, La Chorrera, Chame/Coronado, Río Hato, Penonomé, Divisa, Santiago, Soná, San Félix, David, Bugaba y Paso Canoas–Frontera.

Por el momento, el Banco Europeo de Inversiones y la agencia de crédito a la exportación del Reino Unido (UKEF, por sus siglas en inglés) han ofrecido apoyo financiero para cubrir hasta el 85 % del valor de la obra, que se prevé superará los 5 mil millones de dólares.
El plan maestro contempla una fase posterior que incluirá la extensión hacia la Ciudad de la Salud y Merca Panamá. Para esta conexión, se tiene prevista la construcción de un puente exclusivo para el tren, paralelo al puente Centenario y sobre el Canal de Panamá.