Mitradel: ‘tenemos un país que está mal, pero pinta bien’

La reducción de la tasa de desempleo juvenil, que se ubicó en agosto del año pasado en 15%, es uno de los principales objetivos de acción del nuevo gobierno que presentó esta semana, el programa Mi Primer Empleo para jóvenes de entre 17 a 24 años.

La ministra del Trabajo y Desarrollo Laboral, Jackeline Muñoz de Cedeño, adelantó que este proyecto se iniciará el 1 de agosto y en la primera etapa abarcará a 1,000 jóvenes que participarán de pasantías por tres meses en varias empresas.

Detalló que el Estado pagará a cada jóvenes $300 mientras que las empresas que lo contraten pagaran la diferencia del salario para lograr que tengan un ingreso base que será el salario mínimo, aunque no se especificó cual debido a que hay varios según la actividad económica y al región.

Los jóvenes se tendrán que postular para este programa en un enlace que se creará en la página web de Mitradel o en la dirección de empleo de ese ministerio dado que el proyecto operará como una bolsa de empleo. Las empresas participantes seleccionarán al personal según su requerimiento y los jóvenes pasarán por entrevistas de selección y un plan de capacitación previo, indicaron voceros del ministerio.

La ministra del trabajo, que se reunió este jueves con los representantes del Sindicato Único Nacional de Trabajadores de la Industria de la Construcción y Similares (Suntracs), admitió que la situación financiera del país es difícil, pero señaló que son optimistas de que el panorama mejore para todos los sectores, incluyendo a la industria de la construcción que es una de las que más genera empleo.

“Tenemos un país que está mal, pero pinta bien. La cosa pinta mejor. Entonces, tenemos obras, está el tema del ferrocarril. Hay un montón de obras que están y que sé que se van a ejecutar y que, por supuesto, la clase trabajadora forma parte fundamental de ello”, indicó.

El sindicato de la construcción planteo la necesidad de que Mitradel medie para que los bancos vuelvan a permitirles abrir sus cuentas, pero la ministra dijo que no tiene potestad sobre el sistema financiero y bancario.

Indicó que tratará de conciliar, pero no tiene la potestad de mediar para que la banca acceda a abrir las cuentas.

“Nosotros no somos quienes decidimos si se les abren o no las cuentas, pero nosotros somos quienes los representamos y aquí estamos para ellos (...) Yo no soy el ente que intercede, pero yo soy el ente que los escucha y que busca las maneras de conciliar y ver los temas para apoyarlos”, agregó la ministra del trabajo.

El noviembre del año pasado la Caja de Ahorros y otras entidades procedieron a cerrar las cuentas del Suntracs, alegando que no se habían justificado los recursos. El entonces gerente general de la Caja de Ahorros, Juan Melillo, indicó que al ser una entidad regulada cumplieron con medidas para la prevención del blanqueo de capitales.

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