La Caja de Seguro Social (CSS) celebró el pasado 24 de octubre la graduación de 112 médicos especialistas y subespecialistas, quienes se incorporarán a diferentes provincias del país para fortalecer la atención médica y ampliar la cobertura de servicios especializados.
El acto, realizado en el auditorio de la Ciudad de la Salud, contó con la participación de autoridades de la CSS, representantes del Gobierno y de universidades formadoras, quienes reconocieron la dedicación y el esfuerzo de los nuevos profesionales durante su formación.
Los médicos recién graduados se sumarán a áreas estratégicas como medicina interna, pediatría, ginecología y obstetricia, oftalmología y anestesiología, entre otras subespecialidades de alta complejidad. Su asignación se realizó en función de las necesidades de cada provincia, garantizando que los profesionales refuercen los servicios donde la demanda es más crítica.

Un impulso al sistema de salud nacional
“Cada médico graduado representa no solo una inversión en capital humano, sino también una esperanza para miles de pacientes que necesitan atención especializada”, afirmó el Paulino Vigil De Gracia, jefe del Departamento de Docencia e Investigación de la CSS.
Con esta nueva generación, la CSS refuerza su recurso humano y renueva su compromiso con la salud y el bienestar de la población, asegurando servicios médicos especializados con calidad, ética y excelencia profesional.
Panamá enfrenta un déficit significativo de especialistas médicos, un problema que se agrava en provincias apartadas como Bocas del Toro y en hospitales regionales, entre ellos el Gustavo Nelson Collado, en Chitré, provincia de Herrera. Esta carencia se refleja en la limitada cantidad de profesionales disponibles para sostener la atención quirúrgica en estas zonas.
El análisis institucional de la CSS considera varios factores para determinar la necesidad de especialistas en cada zona: la población, la ubicación geográfica, el número de especialistas en servicio, los que están en formación y aquellos próximos a jubilarse.
Bajo este esquema, la carencia más crítica se concentra en áreas apartadas, aunque también se detectan vacíos en Azuero, provincias centrales e incluso en la ciudad capital, donde la expansión de hospitales e institutos ha elevado la demanda de anestesiólogos y otros especialistas.



