El presidente José Raúl Mulino aseguró que la ola de violencia que se registra en el país es parte de la lucha de pandillas que buscan el control de la droga procedente de Colombia, que en la actualidad está produciendo tres mil toneladas métricas de cocaína.
Aseguró que Colombia ha triplicado su producción de cocaína y que ello obliga a los estamentos de seguridad a redoblar los esfuerzos para detener este flujo de drogas, que ocasiona graves perjuicios a los países que están en la ruta de la droga y más allá.
Entre enero y septiembre de 2025 se registraron 438 homicidios. Hace una semana se reportaron tres asesinatos, uno detrás de otro.
Mulino planteó que aquí no asesinan a la gente “saliendo de misa”, aquí hay mucha gente involucrada en actividades relacionadas con el tráfico de drogas que cumplen diferentes tareas.
Aseguró que el reciente decomiso de 13.5 toneladas de cocaína por el Servicio Nacional Aeronaval (Senan) revela el compromiso de las instituciones de seguridad en combatir este flagelo.

El mandatario contextualizó el duro golpe dado al narcotráfico por Senan, al señalar que la droga decomisada supera por tres el costo de los aviones Tucano, requeridos para la interdicción de las lanchas con droga, trabajo que hoy se realiza con lanchas.
Relató que la violencia derivada del tráfico de drogas no se trata solo de una situación de criminalidad, si no un problema de educación y cultura. “El que se mete en esa actividad lo que está buscando es la muerte”, aseguró el mandatario.

A su juicio, la violencia es el último tramo de la actividad delictiva relacionada con el narcotráfico, primero está la movilización de ese dinero y ocultamiento de esos bienes.
“Es un tema de visión integral en el que se necesita la colaboración de todos los actores de la sociedad. Es un tema de cultura que no se puede corregir de la noche a la mañana”, indicó.
Lea esta nota: Panamá suma 438 homicidios en 2025
También criticó las decisiones de los jueces de garantías que conceden medidas cautelares de notificación periódicas a implicados en delitos graves como el narcotráfico.

“No hay congruencia entre las decisiones asumidas por los jueces de garantías y el esfuerzo que hacen los estamentos de seguridad y las decisiones asumidas por los jueces de garantías”, enfatizó.
En la últimas semanas se han registrado al menos cinco asesinatos de personas, cuyos cuerpos han sido encontrados con impactos de bala.


