El huracán Melissa, que azotó Jamaica el pasado 28 de octubre como un ciclón de categoría 5, dejó daños asegurados en el mercado privado de ese país estimados entre $3 mil millones y $5 mil millones, con una mejor proyección de $3.5 mil millones, según un informe de Moody’s.
La evaluación refleja los efectos combinados de los vientos catastróficos, inundaciones y deslizamientos de tierra en buena parte del territorio jamaiquino, así como las pérdidas económicas por interrupciones prolongadas de negocios e impactos posteriores al evento.

Moody’s advierte que las pérdidas totales podrían incluso superar el producto interno bruto (PIB) de Jamaica, calculado en unos $20 mil millones en 2024, lo que situaría a Melissa entre los desastres naturales más costosos en la historia del Caribe.
Las pérdidas aseguradas para otras islas afectadas —entre ellas las Bahamas, Haití y las Islas Turcas y Caicos— serían menores, indica. No se menciona efectos colaterales del huracán en otros países de Centroamérica.
El análisis considera daños en propiedades residenciales, comerciales, industriales y automotrices, así como interrupciones en operaciones turísticas, una de las principales fuentes de ingreso de Jamaica.
“El huracán Melissa fue realmente un evento generacional para Jamaica y definirá la temporada de huracanes del Atlántico Norte de 2025”, señaló Jeff Waters, director de Modelos de Huracanes del Atlántico Norte de Moody’s, según cita el informe.

Waters añadió que, aunque Kingston se libró de los vientos más destructivos, muchas otras ciudades fueron devastadas.
“Las reparaciones y la recuperación enfrentarán grandes desafíos logísticos, incluso con algunos puertos aún operativos. Esperamos que los esfuerzos de reconstrucción tomen varios meses, si no años”, afirmó.
Por su parte, Raj Vojjala, director general de Modelado y Análisis de Moody’s, destacó que los edificios asegurados mostraron una mayor resistencia estructural, mientras que las viviendas sin cobertura, en su mayoría de menor calidad constructiva, sufrieron daños severos. “La falta de huracanes importantes desde Gilbert en 1988 contribuyó a una menor aplicación de normas de diseño para vientos fuertes”, explicó.

El informe subraya la baja penetración del seguro residencial en Jamaica, en contraste con la cobertura casi total del sector hotelero y comercial.
Esto dejaría a miles de familias expuestas a graves dificultades financieras por la pérdida de sus viviendas y medios de vida.
Melissa, el decimotercer ciclón con nombre y el cuarto huracán mayor de la temporada, alcanzó vientos sostenidos de 185 millas por hora (295 km/h) y una presión central de 892 hPa, igualando los registros de los huracanes Dorian (2019) y del Día del Trabajo (1935) como los más intensos del Atlántico Norte.
Con su paso, Jamaica enfrentó el huracán más poderoso de su historia registrada desde 1851, superando incluso a Gilbert, que tocó tierra en 1988 como categoría 3.



